Minería Moderna y Sostenible – Relaves Seguros

Por: Fernando Rodriguez

Luego de algunos meses de retraso, finalmente en este mes de agosto del 2020, el esfuerzo colaborativo de la industria minera y Naciones Unidas llamado el Global Tailings Review, ha culminado y se ha lanzado oficialmente el Estándar Global de Gestión de Relaves para la Industria Minera.

Lo primero a resaltar de la reunión de lanzamiento, fue el conmovedor relato de Angélica Andrade, una joven que perdió a su hermana, otros familiares y amigos en la catástrofe de la presa de relaves en Brumadinho – Brasil, a inicios del 2019.  Estoy seguro que, la mayoría de los que presenciamos la presentación, sentimos un remezón emocional cuando internalizamos estos relatos e inmediatamente pensamos en nuestras propias familias, lo más preciado en nuestras vidas; y de igual forma intempestivamente recordamos que, en cuestión de segundos, este evento les quitó la vida a 259 personas y 11 que permanecen desaparecidas.

Es realmente preocupante ver que, en los últimos 5 años, la industria de gran minería formal y global, se ha visto afectada por los incidentes catastróficos en Mount Polley en Canadá, Samarco y Brumadinho en Brasil, y otros con consecuencias menores, pero de alto potencial como por ejemplo el ocurrido recientemente en Cobriza aquí en Perú.  En los últimos 20 años, a nivel mundial se ha registrado al menos un incidente material de falla de presa de relaves por cada año, y un total de 71 eventos en ese mismo período; solo en el 2020 ya van 3 incidentes a nivel mundial.

Un riesgo o amenaza que enfrentamos como minería en el Perú, bajo el complejo escenario sanitario, económico y político que vivimos, es que, todo el tremendo esfuerzo de genuinamente convertirnos en los catalizadores de una industria que desarrolle el país, de manera responsable y de excelencia operativa, se pueda ver abrupta e inesperadamente detenida, de experimentar una falla catastrófica de alguna presa de relaves mineros.

Nadie en el sector quiere ver nuevamente casos como el de Angélica Andrade, y entendemos que, como miembros de una gran comunidad minera, hay mucha tarea por hacer para realmente apuntar a que estos eventos con alto impacto en personas y el medio ambiente, simplemente no vuelvan a ocurrir.  ¿Qué debemos hacer entonces?   Podemos empezar cuanto antes con la revisión de este estándar y que justamente busca que los gremios mineros y los responsables de las minas (las actuales y en cierre) donde hay presas de relaves, lo analicen en detalle y evalúen potenciales brechas y oportunidades de mejora para iniciar su implementación.

Si bien este estándar es el más reciente esfuerzo de implementar medidas responsables de la gestión responsable de relaves, utiliza como cimiento, otros esfuerzos previos de la industria reflejados en estándares internacionales para un manejo seguro y responsable de las presas. Dentro de ellos sobresalen los estándares canadienses ICOLD del CDA (Canadian Dam Association) y las guías planteadas por grupos de expertos que promueve el ICMM (International Council of Mining and Metals).

Un aspecto importante a resaltar de este esfuerzo multi-organizacional del Estándar de Gestión de Relaves, es el hecho de haber considerado los resultados de las investigaciones y las causas raíces de los incidentes pasados, y los resultados nos indican la necesidad de reforzar conceptos claves como el liderazgo, rendición de cuentas y responsabilidades para gestionar los relaves al más alto nivel de una organización, mejorar la planificación y control, evaluaciones de riesgos considerando todo el ciclo de vida minero, reforzar las inspecciones/verificaciones (de vital importancia a no bajar la guardia en épocas de Covid)  y en especial la “gestión del cambio” (ya sea cambios organizacionales, administrativos o de ingeniería), son algunos de los ítems que sobresalen dentro de los diferentes principios del estándar.

Si realizamos una evaluación consolidada de los potenciales riesgos significativos que afectan la sostenibilidad operativa de las grandes transnacionales mineras en el mundo, sin la más mínima duda van a aparecer en la lista del Top 5 las fallas geotécnicas catastróficas de depósitos de relaves.

Las evaluaciones de riesgo y la identificación de modos de fallas de presas de relaves, son una excelente herramienta para identificar los peligros, ser conscientes de que la actividad afronta potenciales impactos y aquí viene lo más importante: “Llevar a cabo la implementación y seguimiento a las medidas de control que deben de mantenerse para evitar que esos potenciales eventos sucedan”.

En resumen, este estándar ratifica las mejores prácticas a nivel mundial para asegurar un diseño, construcción, ampliación, operación, cierre y abandono exitoso de una presa de relaves, y aquí les detallo algunos de los componentes a considerar:

  • Liderazgo y compromiso – establecimiento de una estrategia, estándares y la asignación de recursos. Si bien los relaves no son una fuente de ingresos para la operación, podrían tener un impacto catastrófico en la organización en caso de fallas estructurales. Se debe de contar con roles, responsabilidades y presupuestos asignados.
  • Diseño de Ingeniería – tiene que haber un diseño de ingeniería evaluado y construido por expertos geotécnicos (a través de un Ingeniero de Registro), y además mantener las evaluaciones de ingeniería a lo largo de las etapas de recrecimiento y del ciclo de vida minero.
  • Metodologías y Evaluaciones de Riesgos/Gestión del Cambio – En tiempos de pandemia, de ajustes presupuestales y reducción de costos operativos, o de adquisiciones/cambios de dueño, prestar especial atención a decisiones que tengan que ver con presas de relaves. Dejar de lado controles en estas instalaciones por temas de reducción de personal en campo o por costos, puede aumentar significativamente los riesgos.
  • Plan de Operación, Monitoreo y Vigilancia por Terceros – Toda presa que contenga soluciones o lodos, requiere de instrumentación geotécnica, pero que funcione, que sea confiable y que tenga a alguien analizandola constantemente. Se vuelve imprescindible, que, de manera periódica, la operación reciba a terceros expertos geotécnicos a realizar una evaluación integral a la presa. La inversión en estas verificaciones por terceros es baja a comparación de los potenciales impactos por fallas estructurales. Recuerden que el Covid se ha convertido en un catalizador de innovación y tecnología; y aplicarla a la gestión de relaves en el monitoreo e inspecciones debiera ser una prioridad.
  • Balance de Aguas – en tiempos donde afrontamos eventos extremos de precipitación o sequías por efectos del cambio climático, el manejo del agua en una presa de relaves juega un rol clave en la estabilidad geotécnica y en el cumplimiento ambiental.
  • Preparación para eventos de contingencia – se espera no tener que aplicar las medidas de contingencia, pero son necesarias. Toda operación de relaves debe de tener un plan de cómo mitigar o minimizar los potenciales impactos de un evento significativo, incluyendo protocolos de comunicación.
  • En el caso de nuevos proyectos, existen nuevas tendencias de almacenamiento más alineadas al concepto de economía verde, y acorde con la problemática global del recurso agua; por ejemplo podemos ver nuevos proyectos que impulsan el reprocesamiento de relaves existentes, reutilizar el agua filtrada y almacenar los relaves con bajos porcentajes de humedad o inclusive mezclarlos con otros tipos de desmonte en depósitos geotécnicamente estables o reutilizarlos como potenciales coberturas en algunas instalaciones el cierre de una mina.  Todas estas medidas dependen de muchos factores económicos, técnicos y ambientales que definirán su aplicabilidad, sin embargo, debieran considerarse en los escenarios costo-beneficio de nuevos proyectos frente a las metodologías tradicionales de almacenamiento.

Ser parte de la nueva minería no es responsabilidad de solo algunos, depende de todos los que formamos parte de esta industria, los que vienen impulsando el desarrollo de nuevos proyectos, los que producen generando mayores oportunidades para las economías y poblaciones en países en desarrollo, los que cierran minas de manera responsable. No cometamos los mismos errores del pasado y aseguremos un adecuado manejo de las presas de relaves para hoy y el futuro; los mineros sabemos cómo y lo hacemos bien.